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 EL FAMOSO TRIÁNGULO DE LA VIDA (UNA MALA PRÁCTICA EN NUESTRA REGIÓN).

 

 

Cada día que hablo sobre la seguridad del trabajador, los planes de prevención en las empresas y los sistemas integrados de gestión de riesgos que promueven la sostenibilidad y rentabilidad de un negocio, escucho los comentarios de colaboradores e incluso de facilitadores de organizaciones serias, queridas y respetadas; sin embargo, acostumbrados a "repetir como asertiva cualquier información que llegue a internet"; y para ser específico, me refiero al famoso "triángulo de la vida", teoría que en centro y sur América no debe aplicarse, puede causar mucho daño y es motivo de esta publicación con el objetivo de evitar que ciudadanos como usted o como yo la sigan difundiendo o pretendan ejecutarla.

 

La fotografía muestra los restos de un colegio en la población de Cariaco, al noreste de Venezuela, donde muchos niños fallecieron, lugar donde su heroica maestra Madeleilis Guzmán (QEPD) corrió con similar destino al rescatar a muchos niños y a quien la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológica (www.funvisis.gob.ve) en reconocimiento póstumo, atribuyó el nombre del proyecto más exitoso de dicho ente, hoy conocido como "Aula Sísmica", lugar donde miles de niños aprende a actuar antes, durante y después de un terremoto. Esta historia no es ajena a Panamá, hace mese en una escuela local falleció una criatura de 9 años al caerle una pared y estuvo muy próxima a repetirse en la Escuela de Gualaca (Provincia de Chiriquí), cetro educativo desalojado oportunamente por Sinaproc, región donde la actividad sísmica es diaria, relevante, vinculada a la cadena volcánica y el cinturón de fuego centroamericano.

 

La teoría del triángulo de la vida indica que ante un sismo, las personas no deben colocarse debajo de mesas, camas, escritorios o pupitres, refiere erróneamente que las personas se ubiquen al lado de dichos objetos, asumiendo que un triángulo podrá formarse al caer una estructura de un nivel superior. Si seguimos esa teoría en el salón de clases que se muestra a continuación, tendríamos varios heridos por no protegerse y esperar que el famoso triángulo se forme.

 

 

Cuando hablo de la resistencia al impacto de un casco de seguridad en cientos de kilogramos o unidades de fuerza y de la resistencia a la temperatura de una tela retardante del fuego como el nomex, advance, kevlar o basofil por encima de los 400 grados celsius, debo reflexionar que un ser humano no tiene iguales capacidades; el solo hecho de recibir un impacto leve fracturaría el cráneo o la columna vertebral y a las 38.5 grados celsius ya tenemos el inicio de una fiebre, pudiendo convulsionar a más de 40.

 

Observando la realidad de nuestros países, las principales edificaciones e incluso escolares, tienen de techo a pesadas estructuras, ventiladores o abanicos, pisos supriores hechos de hormigón, cabillas, vigas, placas de concreto; es decir, medio de ahorro de espacio horizontal contra el espacio vertical; quizás ese sea el caso mientras lee este artículo. Técnicamente ningún ente oficial en centro y sur América avalado el famoso triángulo, por el contrario emiten alertas para que no sea difundido y la razón es simple: USTED NUNCA DEBE DEJAR DE PROTEGERSE DE LOS OBJETOS QUE CAEN DE UN NIVEL SUPERIOR, ese triángulo podría formarse sobre usted o teniendo su cuerpo como uno de los vértices. Si se llega a formar, lo usa, pero no se exponga asumiendo algo irreal, use cualquier objeto resistente que mitigue el impacto de lo que pueda caer; más aun en los colegios y oficinas donde pasamos más del 50% del tiempo y en el hogar donde tenemos lo más preciado y valorado por todos, nuestra familia.

 

Debo señalar para despedirme por esta edición lo vital que es el saber actuar de manera preventiva, evaluando su hogar, identificando todo lo que pueda caer sobre usted ante un movimiento telúrico, anclándolo a las paredes, bajando los objetos pesados, identificando rutas de escapes, colocando números de emergencia a la mano, preparando kits de primeros auxilios, digitalizando documentos importantes, manteniendo una reserva de baterías, linterna, alimentos duraderos, enseñando a sus hijos lo que usted quisiera que ellos hicieran en estos casos e inclusive a como ubicar a familiares ante una posible falla de los sistemas de comunicación telefónica.

 

 

Durante un sismo protéjase, evacúe la edificación a la brevedad posible sin usar elevadores y una vez en planta baja aléjese de la estructura; dado que vidrios y ventanales o hasta la misma edificación podría colapsar ante réplicas. No encienda nada eléctrico si antes no ha cerrado el gas, espere que personal competente inspecciones su edificación si tiene dudas sobre la estabilidad o seguridad de la misma, notifique cualquier irregularidad.

 

Aprendamos de las vivencias ajenas, seamos proactivos con la seguridad, mitiguemos el riesgo y brindemos más seguridad a nuestro grupo familiar.

 
Saludos y éxito.
 

Pablo C. Ochoa R.

Director Proyectos y Seguridad de Panamá
Instructor NFPA ProBoard
Skype: pablocesarochoar
Cel: +507-65600909
@Proysegpanama
Pin: 2979C4B3
 
Le invito a unirse al GRUPO VIRTUAL DE SEGURIDAD Y EMERGENCIAS, escriba al correo: 
 
 


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  1. Excelente su iniciativa Sr. Pablo, le felicito e insto su perseverancia en materia de seguridad.
    Puerto La Cruz;
    Rubén Márquez

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  2. Saludos Sr. Pablo excelente su publicaciòn muy bueno esa aclaratoria.
    Calabozo Estado Guàrico
    Oscar Morales

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  3. Saludos Sr Pablo. Escelente publicacion, espero poder conocerlo en el 2er congreso internacional de ingenieria y control de riesgo que se realizara en ciudad bolivar, venezuela.

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